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Murcialiberal

Ecos del fin de semana

Estaba esperando a que Javier Orrico colgara en su bitácora el magnifico artículo que publicaba en La Opinión el pasado domingo (venga Paloma, un poco mas de esfuerzo y tu sitio en Internet subirá como la espuma). El artículo se titula: "Ibarra ante el Mesías"

"Todo está mucho más claro", que decía Pedro Salinas sobre la poesía como iluminación de la realidad. La idea de España de ZP, esa que no puede explicitar, claro, es la de Maragall y Carod, Otegui e Imaz, y toda la cohorte pluri-pluri y nazionalsocialista (Nafarroa bai, la Chunta, el Bloc, el BNG, "Madrazares", EA), además de la familia de Chaves, las constructoras electrificadas, la Caixa, la Kutxa y hasta la madre que parió a Panete, siempre que odie a España, en todos los cuales piensa apoyarse para su perpetuación. Otras veces he escrito que se iba poniendo flequillo de Napoleón, y es que piensa coronarse. Y Garzón de chambelán.

Completo, aquí

Pablo Molina en la página del Instituto Juan de Mariana ha resumido las Jornadas sobre la Filosofía Política del Liberalismo. Escribe en "El Poder de las Ideas":

Cuando uno defiende ideas a contrapelo del discurso dominante, sobre todo al llegar a cierta edad, acaba adquiriendo un grado quizás excesivo de escepticismo. Esa especie de conciencia de que tus ideas nunca van a triunfar, lejos de provocar frustración proporciona una gran tranquilidad de espíritu. Ya no luchas para cambiar el mundo; al contrario, te refugias en sus certezas intentando que el mundo no te cambie demasiado a ti. Sin embargo, eso significa infravalorar la potencia espiritual de los principios que llevas defendiendo toda tu vida: la libertad del ser humano frente al poder del estado, lo individual frente a lo colectivo, el orden natural frente a la ingeniería social, el derecho a ordenar tu vida según tus propios principios y no bajo el dictado de la corriente contracultural del momento...

Pero no queda ahí la cosa, pues en Libertaddigital escribe sobre la aparición de un ser muy particular en las mismas Jornandas; en concreto en la que impartía Jerónimo Molina, que nos explicaba el carácter antiliberal de la Unión Europea. El artículo se titula "El tontolindango":

Pasaban los minutos y el buen hombre seguía sin entender una sola palabra. Libertad, derechos individuales o libre mercado tienen en la jerga progre unos significados completamente opuestos a los que se les atribuía en la charla. Para que se hagan una idea del tremendo suflé de su cerebro, cuando tomó la palabra en el turno de preguntas comenzó a hablar de la Revolución Francesa y del humanismo en términos semejantes a como lo harían Fidel Castro o Chávez (con ese o con zeta, que para el efecto da lo mismo). Finalmente, antes de acabar de formular su pregunta se marchó de la sala, acusando a los presentes desde el pasillo de haber organizado una guerra civil con el objetivo de asesinar a un millón de compatriotas. Lo que se dice una mente portentosa en plena ebullición.

Para leerlo completo, aquí.

No quiero dejar de reseñar su artículo semanal en el mismo diario digital. Se titula: "Intervencionistas a todo tren". José Carlos Rodríguez también la reseña en su bitácora "La hora de todos".

No perderse el famoso video que nos ofrecen en El Mentidero de Fernando Arrabal en el programa de Sánchez-Dragó. Aunque conocido no está de más recordarlo, pues la risa está asegurada.

Para terminar una bitácora que incorporo a mis enlaces. Un murciano muy particular, Orel, para los amigos, que publica su bitácora en la amalgama de Periodistadigital: "La Espingarda". Una bitácora que es actualizada diariamente con sus acertados comentarios políticos. Su página personal también está en Blogia: "Orel. Sahumerios y arrebatos".

6 comentarios

Miguel -

Me alegra ver que se rebaja el tono de esta discusión. Yo puedo coincidir con usted en que la sátira es un medio divertido y eficaz de ejercer la crítica. Sin embargo, insisto en que el señor Molina lo que hace es tratar de meter a toda la izquierda en un sólo montón, y tratar de identificarla con un personaje extravagante que sólo se representa a sí mismo; además, lo hace refiriéndose al aspecto físico de esa persona sin más, para denigrarla; lo de Quevedo es mucho, pero que mucho más. A uno le empuja un odio exacerbado, al otro, un talento y una ironía exquisita. Y no estoy hablando ya de calidades, sino de intenciones.
-Respecto a lo de preocuparse por mi crítica positiva a su artículo, no tiene porqué. Como le dije, me considero un liberal moderado, y como tal considero la mayoría de las intromisiones del Estado en el mercado y la vida pública como monstruosas. Pero también creo ser de izquierdas y algunas de esas intromisiones me parecen fundamentales para una sociedad donde una igualdad de oportunidades permita mayores cotas de libertad. Sólo espero servirle a usted como ejemplo de que izquierdas, como derechas, hay muchas y de distintas intenciones, y considero fundamental un diálogo tranquilo entre unos y otros. Pero resulta muy muy difícil cuando el ambiente se enturbia, cuando hablamos con las entrañas en lugar de con la razón.
Respecto a lo de comentar o no comentar, evidentemente cada blogger puede hacer lo que le venga en gana, es su casa. Algunos de los más populares incluso tienen desconectado el sistema de comentarios. Yo, sin embargo, creo que la ventaja de este medio es precisamente que hace muy fácil la discusión, el debate, y un blog que no se cuida de los comentarios me parece una columna de opinión que en nada se aprovecha de las ventajas políticas de las nuevas tecnologías. Un saludico murciano.

Marinto -

Primero me gustaría retirar y rectificar cualquier adjetivo que le pudiera haber molestado en lo personal.

No me gusta entrar en los comentarios por ésto mismo, pues se utilizan mas para el insulto y el menosprecio hacia el que comenta, que para la exposición de ideas y opiniones que puedan ser interesantes para complementar lo escrito. Yo mismo he caído en ese error para lo poco que entro al trapo, pero consideré oportuno defender a quien admiro, pues me pareció de una injusticia supina comparar a Pablo con la pederastia.

La literatura y la historia del columnismo español está lleno de referencias personales, que no ha hecho mas que enriquecerlo:


“Yo te untaré mis obras con tocino
porque no me las muerdas, Gongorilla,
perro de los ingenios de Castilla,
docto en pullas, cual mozo de camino;

apenas hombre, sacerdote indino,
que aprendiste sin cristus la cartilla;
chocarrero de Córdoba y Sevilla,
y en la Corte bufón a lo divino.

¿Por qué censuras tú la lengua griega
siendo sólo rabí de la judía,
cosa que tu nariz aun no lo niega?

No escribas versos más, por vida mía;
aunque aquesto de escribas se te pega,
por tener de sayón la rebeldía."

(Quevedo)


Quizás en esto de internet sea una norma no escrita (lo de comentar tus propios artículos), pero como es una decisión personal y lícita espero que la comprenda.

Reiterarle mis disculpas y darle mi agradecimiento por haber acogido tan bien mi último artículo, aunque si me permite la broma, no sé si empezar a preocuparme ;)

Miguel -

Como no suelen ser contestados mis comentarios en este blog, ha pasado el tiempo y no he visto esta gran contestación del autor de este su blog. Noto sin duda que está enfadado, pero yo trataré de ser tranquilo y reposado y contestarle punto por punto.
Empezaremos por el momento en el que se le va la pinza, al final de su comentario, para volver después al principio. Lo hago así porque no parece usted leer muy atentamente los comentarios, y lo del final como que es lo que más me interesa porque es donde se pone usted en ridículo:
Cito:
1. "Como lo del decoro, la higiene, tanto intelectual como física, la moral y las formas, son vocablos eliminados de su diccionario, no puede llegar a entender que a veces en reuniones donde hay mas de dos personas, la presencia de “tontolindangos” disfrazados de intelectuales producen la misma pena que da el contemplar a aquellos que son incapaces de controlar el mecanismo de sus esfínteres."
Sigo sin comprender qué tiene que ver el esfínter con la capacidad intelectual de cada uno. Respecto a mi higiene física creo que no me conoce usted para juzgar acerca de tal cuestión, y la máxima prueba de falta de higiene mental la veo en una persona que discrimina a personas por su aspecto físico. Y ese es usted o, al menos, su querido Molina quien lo hace, y no yo. ¿Qué he hecho para no ser decoroso? ¿He puesto en el comentario alguna foto mía desnudo? ¿He dicho palabras malsonantes? De momento, el único que ha insultado aquí ha sido usted y, claro, su amigo Molina. La cuestión de la moral es cosa de cada uno. ¿O es que pretende decirme usted qué es inmoral o no lo es? No hombre no, que Franco ya murió, y eso ya no puede usted hacerlo... Salvo, claro, si se refiere usted a actitudes universalmente reprobables y penadas por la ley, como la pederastía. Le aseguro, por otra parte, que a mí los tontos me irritan igual o más que a usted, pero pocas cosas más tontas que considerar a alguien un imbécil por su opción ideológica. Y eso, mi querido amigo, es usted quien lo hace, y no yo, aunque trate de darle la vuelta a la tortilla. A lo escrito me remito.
2. "No merecería por mi parte ni un breve comentario para un famélico intelectual que se cree como único garante de lo políticamente correcto y lo incorrecto."
Como veo, usted, a veces, comparte la tendencia al insulto injustificado para generar desprecio; supongo que por ello le gusta tanto Libertad Digital.
2. "Es lo habitual en gente de su calaña pues en su natural costumbre de socializarlo todo, tienen la tendencia innata a considerar que la ironía, el humor, o la capacidad para escribir, es un don que tan solo pertenece a los investidos con el halo de lo progre" ¿Cuál es mi calaña, señor mío? ¿Soy rojo, soy progre, basándonos en las magníficas definiciones del post que nos ocupan? ¿Conoce usted mi filiación política? ¿Sabe si soy socialista? ¿O del PSOE? ¿Yo lo socializo todo? ¿Qué quiere decir socializar en este contexto? Le corregiré desde mi escaso conocimiento sobre mí mismo: no soy socialista, más bien socialdemócrata y bastante liberal: por eso me gusta mucho su post más reciente sobre las juventudes peperas. En ningún momento me constituyo en juez de quién maneja bien la ironía y quién no, salvo desde mi propia opinión, que trato de argumentar, acertadamente o no, y que usted sólo contesta desde el desprecio y no desde la razón. Yo no identifico, como usted parece hacer, ingenio o inteligencia con opción política, y por tanto creo que cualquiera puede ser ingenioso, divertido, venga de donde venga. Es usted el que, defendiendo opiniones impresentables como las de ese señor, identifica cualidades personales con opciones políticas; creo por tanto, que debería leer el artículo que tan felizmente señala y mi comentario al respecto, porque me me parece que se está usted liando. He de reconocer que lo de "Fedeguico" ha estado mal, pues hace referencia a un problema físico de ese señor, y es que ya me he acostumbrado para no tener que escribir sus largos apellidos; le pido mis disculpas. Sin embargo, yo jamás trataría de identificar a toda la derecha con Federico Jiménez Losantos y sus esbirros de Libertad digital: sé distinguir perfectamente entre un liberal de verdad y un católico ultraconservador disfrazado como tal. De hecho, hay opiniones más que respetables en Libertad Digital, pero usted tiene cierto interés en destacar aquellas que vinculan defectos físicos o aspectos extravagantes con cuestiones intelectuales o políticas, de una manera bastante infantil. Respecto lo de "hipocresía pederastafilial" no es humor, sino una forma de mostrar mi repulsa ante aquellos que se erigen en bastiones morales y luego tratan de ocultar con dinero la conducta vergonzosa y repugnante de muchos miembros relevantes de su organización. Si googlea usted un poco, podrá ver como se han "neutralizado" muchos de los juicios pendientes por tal asunto en los Estados Unidos, y que implicaban directamente a altos cargos de la jerarquía eclesiástica. También podrá informarse acerca de las maniobras de Ratzinger para minimizar el impacto en los medios de tal repugnante actitud. A mí eso me parece la más pura hipocresía y desde luego, bastante condescendiente con algo tan grave como es la pederastía. Así que por ahí si que no paso. Si a usted le da igual la postura de la Iglesia acerca de este tema en sus propias filas, allá usted. Le aseguro que si yo actuase al modo asqueroso de su admirado Molina, hubiese tenido que decir, con ese afán generalizador que le caracteriza, que, por ejemplo, "todos los católicos son unos pederastas". Como yo uso la cabeza en lugar de las entrañas para justificar mis opiniones, pues me parece que eso es una barbaridad y acuso de lo que acuso con argumentos y no me dedico a decir barbaridades.
3. "La gente de derechas también puede ironizar de quien le plazca, como habitualmente los “socialdemócratas” (sic) lo hacen con aquellos que no pertenece a la secta intelectual que le acoge." A mí no me acoge ninguna secta. Le basta visitar red progresista para comprender que existe discusión interna y que hay más de una corriente por allí, cosa que no sucede en red liberal salvo en casos excepcionales como en el de Berlin Smith. Por cierto el primer (sic) lo entiendo, pero, ¿y el otro? ¿como quiere que escriba socialdemócrata? ¿social-demócrata? ¿persona que gusta de la social-democracia? Usted me dirá.
Sin nada más que añadir, y habiendo leído post suyos, especialmente el último, donde demuestra su saber hacer intlectual, independientemente de si comparto sus ideas o no, le recomiendo que use más sus capacidades y no se deje llevar por el enfado, que anula la razón y nos lleva a escribir tonterias e insultos. He de decirle, con mucha pena, que ha actuado esta vez como un troll de su propio blog.

argonais -

No te muerdas que te envenenas.

Marinto -

No merecería por mi parte ni un breve comentario para un famélico intelectual que se cree como único garante de lo políticamente correcto y lo incorrecto. Es lo habitual en gente de su calaña, pues en su natural costumbre de socializarlo todo, tienen la tendencia innata a considerar que la ironía, el humor, o la capacidad para escribir, es un don que tan solo pertenece a los investidos con el halo de lo progre. Lo de la “hipocresía pederastafilial”, o lo de llamar “Fedeguico” continuamente a Jiménez-Losantos, es para usted, claro está, una manera mucho mas inteligente de mofarse de la gente, y no está desprestigiando “hablando acerca del físico de un individuo en cuestión en lugar de hacelo (sic) acerca de sus ideas”. La gente de derechas también puede ironizar de quien le plazca, como habitualmente los “socialdemócratas” (sic) lo hacen con aquellos que no pertenece a la secta intelectual que le acoge.

Como lo del decoro, la higiene, tanto intelectual como física, la moral y las formas, son vocablos eliminados de su diccionario, no puede llegar a entender que a veces en reuniones donde hay mas de dos personas, la presencia de “tontolindangos” disfrazados de intelectuales producen la misma pena que da el contemplar a aquellos que son incapaces de controlar el mecanismo de sus esfínteres.

Miguel -

Resulta curioso su aprecio ante aquellos artículos que, de tan estúpidos, tratan de desprestigiar hablando acerca del físico de un individuo en cuestión en lugar de hacelo acerca de sus ideas. Hace unos meses fue la higiene personal de Marx, y ahora nos sale usted con un tipo que basa su artículo en otro tipo extravagante, "una lástima de criatura". No expone nada de lo que dijo aquel ser, que parece que no dijo nada, pero aún así este lumbreras pretende hacerle pasar por adalid del progresismo. En primer lugar, el concepto "progresismo" es tan, tan vago, sobre todo usado por la derecha pseudoliberal, que no significa nada. Digamos que significa lo mismo que la frase "mi patria es la libertad". Resulta absolutamente ridículo y usted, que le tiene tanta tirria a todo lo que huela a izquierda, le rie las gracias a algo que no tiene ni pies ni cabeza. Evidentemente, tiene un aire a lo Benedicto XVI (lo digo por la hipocresia pederastafilial) pretender que esa pobre criatura representa a alguien excepto a sí mismo. Y aún así, tratar de presentarnos su catadura intelectual describiéndolo fisicamente me trae el recuerdo de mis profesores franquistas que te suspendian si llevabas un pendiente porque eras mala gente independientemente de lo que dijesen tus modales y tu expediente académico. Gentuza, se llama a ese tipo de personas en democracia.
Por último resulta realmente de una inconmensurable ignorancia pretender que existe un uso "original" de los conceptos políticos para referirse a ese uso como el único correcto: "Es lo que pasa cuando se devuelve a las palabras su significado original, que para los progres se vuelven ininteligibles." Aparte de que se contradice a sí mismo más abajo en este sentido, a nadie con una mínima formación académica se le escapa que cada teórico hace uso de los conceptos, los modifica, los canaliza y los integra dentro de su teoría. Hablar del significado "original" de los términos implica un desconocimiento de corte platónico -o más probablemente católico- de lo que es la teoría política hoy en día por lo que parece que además de ese señor extravagante quizás sobraba en ese foro el autor del artículo, el señor Pablo Molina.
Pd. Se me olvidaba. Respecto a la entradilla del texto, este tipo demuestra que no tiene ni idea de nada: aprender a distinguir socialdemocracia con socialismo, ecologismo con principio de responsabilidad, etc. es de primero de carrera. De CUALQUIER carrera; es decir, de cualquier persona que lea un simple períodico pretendiendo enterarse de lo que lee. Pobre, pobre Molina.